Construcción nueva o renovación: en todo el país, miles de puentes deteriorados esperan su renovación. En ese caso, la construcción nueva parece más una cuestión de lujo. (Foto: Pixabay)
Construcción nueva o renovación: en todo el país, miles de puentes deteriorados esperan su renovación. En ese caso, la construcción nueva parece más una cuestión de lujo. (Foto: Pixabay)
2025-04-24

Un nuevo estudio de la organización Transport & Environment (T&E) revela lo mal que está el estado de los puentes viales en Alemania, y qué consecuencias puede tener esto para la economía, la logística y la seguridad del suministro.

Según esto, alrededor de 6.000 puentes en autopistas y carreteras federales ya cumplen hoy en día con los criterios del gobierno federal para una nueva construcción de reemplazo. Esto corresponde aproximadamente a una cuarta parte de las estructuras existentes. Según T&E, la necesidad de inversión solo en esta área asciende a casi 100 mil millones de euros. A esto se suma una brecha masiva de renovación en puentes bajo responsabilidad municipal.

La Asociación Regional de Transportistas de Baviera (LBS) se ve confirmada en su crítica por estos resultados. La industria ha estado pidiendo durante mucho tiempo más rapidez en el mantenimiento y renovación de las vías de tráfico.

“En tiempos recientes, hemos visto repetidamente cómo se producen graves interrupciones en las cadenas de suministro porque los puentes, literalmente pilares de la infraestructura, ya no son utilizables o solo están disponibles con capacidades muy limitadas”, explica Sabine Lehmann, directora gerente de la LBS, con referencia a ejemplos destacados como la A45 en Lüdenscheid, el puente cerrado de Carola en Dresde o el puente de Damaschke recientemente clausurado en Magdeburgo.

El LBS considera particularmente crítico que los retrasos en la renovación causen no solo cuellos de botella logísticos, sino también costos colaterales significativos. Las rutas de reemplazo prolongan los tiempos de viaje, afectan a los conductores, empeoran el balance ambiental y deterioran el rendimiento de toda la cadena logística. Lehmann advierte:

“De incidentes como estos y de los cierres asociados se derivan graves consecuencias para la seguridad del suministro tanto para la economía como para los consumidores, así como para el rendimiento de las empresas logísticas y la carga de su personal.”

El analista de T&E, Benedikt Heyl, lo formula de manera más drástica:

La Autobahn GmbH ya lleva a cabo una "triaje en la modernización de puentes de carretera". “Esto es absurdo y costoso, porque cada renovación retrasada costará mucho más en el futuro.”

Heyl critica que el actual programa de modernización de puentes del Ministerio Federal de Transporte solo prevé el reemplazo de alrededor de 4.000 puentes hasta 2030, mucho menos de lo necesario. Además, el programa se limita a las estructuras a lo largo de la red de transporte transeuropea (TEN-T), mientras que más de 12.000 puentes adicionales quedan fuera en el resto de la red.

También el Tribunal de Cuentas Federal duda de que las medidas ya planificadas se puedan implementar puntualmente. Falta capacidad en la planificación y ejecución de obras, una opinión que también comparte el LBS. Lehmann ve en la duración de los procedimientos un problema central:

„Si la oposición desde la zona de confort lleva a aceptar daños por varios millones de euros, entonces los procedimientos correspondientes necesitan una nueva logística.“

El estudio de T&E señala además importantes lagunas de datos en puentes bajo administración municipal. Tres cuartas partes de la red vial alemana están bajo la responsabilidad de los estados y los municipios, pero faltan cifras fiables sobre el estado de las edificaciones allí. Algunas encuestas también indican una alta necesidad de renovación. Según el Instituto Alemán de Urbanismo (Difu), la necesidad de inversión en el ámbito municipal es de más de 46 mil millones de euros, y otros 10 mil millones corresponden a carreteras estatales.

T&E exige por lo tanto una reorientación fundamental de la política de transporte. La renovación debe tener prioridad sobre la nueva construcción. El gobierno federal y los estados no solo deben garantizar una financiación a largo plazo, sino también apoyar específicamente a los municipios. Las inversiones en el traslado de mercancías respetuoso con el clima y el uso de materiales de construcción sostenibles como acero y cemento verdes deberían ser obligatorias.

Heyl lo resume en una frase:

„Alemania necesita un cambio de rumbo estratégico: Quien en tiempos de puentes colapsantes y crisis climática aún sueña con nuevas construcciones de carreteras, no ha reconocido la gravedad de la situación. Ahora, cada centavo destinado a la infraestructura vial debe fluir hacia la renovación.“

Para el sector del transporte de mercancías, estas advertencias son más que un llamado: son una urgente orden de acción. Porque una infraestructura funcional no es una opción, sino la base para la estabilidad económica, la seguridad del suministro y la movilidad sostenible.